Después de leer la lectura, solo me queda una pregunta, y esta es: ¿Es el modelo de sociedad, basado en los avances tecnologicos, un avance o un retroceso para todos nosotros?.
Resulta ser que el internet se vuelve cada día más importante en nuestras vidas, un ejemplo claro es, cuando hubiéramos imaginado hace 10 años atrás, de tener un ramo en la Universidad en donde aprendiéramos de los fenómenos del Internet 2.0. Sin duda, nadie lo hubiese pensado antes.
Pero al mismo tiempo, si bien el Internet nos trae muchas cosas beneficiosas, como lo son los avances en las comunicaciones, conexión, negocios, etc. También nos abre un nuevos GRANDES problema, como lo impersonal que el es trato entre nosotros, el sentido de propiedad, se ha ido perdiendo, de tal forma que como lo hemos conversado en clases, se han abierto GRANDES interrogantes con respecto a quien es el dueño de que.
Sin duda el internet, a cooperado en gran medida al avance de la sociedad, siendo probablemte el actor fundamental de este, pero sin duda, al mismo tiempo rompe con el modelo de sociedad al cual estábamos acostumbrados, para mi lo más preocupante, más que el derecho de propiedad, o los problemas legales que existen tras de esto, el lo impersonal que se han vuelto las relaciones, quiero graficarlo en un ejemplo practico.
Antiguamente cuando un hombre quería jurársela por una mujer, como por ejemplo, para pololiar con ella, debía ir a verla, mandarle flores, escribirle una carta y dejársela en la casa, o tantas cosas, como serenatas, o lo que sea, hoy en día vemos que ir a verla fue reemplazada por Gmail talk o MSN, el escribirle una carta por los mensajes de texto o el mail, las serenatas por mandar canciones al mail, las flores se pueden comprar por Internet, en tan solo 3 min y dejárselas en la casa, olvidando el romanticismo que significaba ir a elegir personalmente las flores y etc.
Creo que el Internet nos ha facilitado la vida de manera absurda, pero no hay que olvidar las cosas importantes de la vida, como lo es la importancia de mantener los sentimientos involucrados en las relaciones, y no solo de pareja, sino que en todas aquellas que llevamos en el día a día.